
Vecinos reclaman a ABSA una pronta solución ante el desborde de efluentes cloacales que luego se desparraman por las calles y veredas y en algunos casos llegan a las viviendas. Además a esto se le suma el olor nauseabundo que se percibe en días posteriores a las lluvias.
Preocupados ante la falta de una solución, expresaron a la gaceta: «La tapa está en calle 77 entre España y Gral. Paz y hay otra en 77 y Suipacha. Hace algunos meses ya estuvieron revisando pero por lo visto no hubo solución y ahí quedó, no queremos acostumbrarnos a convivir con ésta situación. Primero es la calle, lo que va uno pisando y desparramando y luego es convivir con el olor dentro de nuestras casas y comercios. Vecinos que hemos revisar los desagües y cañerías de nuestras propias viviendas y todos coinciden en la misma situación y por eso se han hecho reclamos a ABSA, pero lamentablemente no dan una solución definitiva o dicen que tenemos que esperar el nuevo colector cloacal. No puede ser que no tengan soluciones. El agua y residuos cloacales en las calles es cosa de todos los días».
A ésta situación se le suma también la rotura de un caño ubicada en calle 77 y Suipacha que data de mucho tiempo y que afecta varias cuadras. Para evitar que el agua se estanqué los vecinos limpian el lugar, pero esperan que se solucione también.
Vuelco de efluentes cloacales: aguas negras y grises
Los líquidos cloacales poseen constituyentes que pueden ocasionar afectaciones de tipo sanitario y/o ambiental, por lo tanto, es indispensable su adecuado tratamiento previo al vuelco. Entre los principales contaminantes se encuentran la materia orgánica y microorganismos patógenos. También pueden mencionarse: sólidos sedimentables, detergentes, grasas, aceites, nitrógeno y fósforo.