Abril, Justina y una aclaración urgente sobre la donación de órganos

Interes General

 

Con dos familias atravesadas por el dolor, la de Justina, que está a la espera de un corazón que salve su vida, y la de Abril, que falleció en forma trágica, es importante ser cauteloso a la hora de informar, para evitar malos entendidos y confusiones. También por respeto a las 11.000 personas que integran la lista de espera del INCUCAI.

Esta mañana comenzó a circular por redes sociales y algunos sitios, información errónea que afirmaba que la familia de Abril Bogado –la nena de 12 años que murió baleada durante un asalto en La Plata- había decidido donar su corazón para Justina Lo Cane, también de 12 años, que está en emergencia nacional. Rápidamente la falsa información comenzó a viralizarse, generando todo tipo de repercusiones en las redes.

Luego, en el muro de Facebook de “La Campaña de Justina”, con la que la familia de la nena internada en la Fundación Favaloro lleva adelante un trabajo de concientización sobre la donación de órganos se publicó la siguiente aclaración: “De momento la familia Lo Cane no ha recibido ningún tipo de comunicación ni contacto por parte del INCUCAI –que les informe- que el corazón donado por la familia de Abril, en un gesto de enorme amor, sea destinado a un trasplante de Justina”. A las pocas horas, agregaron otro mensaje: “Agradecemos a la familia de Abril y a todos uds. No hay compatibilidad entre el corazón de Abril y el que necesita Justina. Seguimos buscando ese mágico corazón para salvarle la vida a Justina”.

Sin embargo, fuentes del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires informaron a Clarín que los médicos que atendieron a Abril no pudieron ni siquiera plantearle a la familia de la nena la posibilidad de donar sus órganos, ya que “no se encontraba en condiciones, por lo que no se pudo cumplimentar el protocolo y dar intervención a CUCAIBA (Centro Unico Coordinador de Ablación e Implante de la Provincia de Buenos Aires)”. Desde el CUCAIBA se agregó que ayer el equipo del Servicio Provincial de Procuración concurrió al hospital de Niños Sor María Ludovica, donde estaba la niña de 12 años, para su evaluación neurológica. Los profesionales explicaron que “no se pudo llevar a cabo el protocolo de diagnóstico de muerte bajo criterios neurológicos dada la inestabilidad hemodinámica de la niña, hecho que la llevó a un paro cardíaco irreversible, circunstancia que imposibilita la donación de órganos”.



Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *