El peligroso engaño a quienes reciben el Ingreso Familiar de Emergencia

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Los engaños por Internet, estafas telefónicas y cuentos del tío son uno de los delitos que más crecieron en los últimos años: la variación anual de la Procuración bonaerense mostró que hubo más de 12.900 expedientes por este delito en 2018 luego de 8.300 en 2017. Es, por otra parte, mucho más sencillo, un delito sin sangre y con efectivo en mano casi garantizado. Salir a robar a la calle sale caro en términos de privación de la libertad, las golpizas y amenazas a víctimas o la posibilidad de un homicidio criminis causa suman años de condena en la lista de agravantes. Estafar a alguien, de acuerdo al artículo 172 del Código Penal, se castiga con un mes a seis años de encierro. Además, es un hecho exarcelable si el tribunal a cargo del caso no considera que hay riesgos procesales.

Entonces, el delito se adapta. El cuento pérfido del IFE, robarle a alguien lo poco que tiene, se suma a otras variantes perpetradas por charlatanes a lo largo del país, con otros falsos subsidios, regalos de comida, con phishing de datos en simples formularios online. En Neuquén, dos semanas atrás, un estafador despojó a una mujer de 83 años de 900 mil pesos al decirle que era su nieto y que le habían hecho un hisopado por coronavirus. En la zona, según fuentes policiales, la misma banda habría atacado a otros siete ancianos para llevarse casi 11 millones de pesos sin una sola gota de sangre en el pavimento.

Horacio Azzolin, el fiscal a cargo de la UFECI, el área de la Procuración dedicada a investigar delitos informáticos, se movió con rapidez a lo largo de la pandemia, detectando, persiguiendo y alertando al público sobre jugadas online de estafadores en zonas particularmente sensibles como sitios de compra y venta online. El engaño con el bono IFE no es nuevo para el fiscal: “Tuvimos muchos casos con el IFE como excusa. Ocurren al voleo. Buscan ganar la cuenta bancaria y con eso luego hacen desastres. Esta modalidad no es nueva. Antes se hacía con otra excusa, como un supuesto premio. Hace meses que emitimos comunicados para que la gente evite entrar en los llamados”.

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