La historia comienza cuando la nieta de esta mujer de 80 años, a quien también se la llevaron presa, fue acusada por su cuñado de comercializar estupefacientes.
El episodio ocurrió en Hurlingham, cuando personal policial tuvo que dirigirse a un domicilio en la esquina de Bach y Pérez Galdoz para solucionar una discusión que había en una casa de esa zona.
La policia encontro a un hombre de 38 años que acusó frente a los efectivos que su hermano, de 36 años, y su cuñada, de 34, vendían drogas. Esta mujer se había ido a la vivienda de su abuela, que quedaba a aproximadamente 100 metros.
Al llegar a la vivienda ubicada en Pérez Galdoz al 1100, antes señalado por el hombre de 38 años, los policias se encontraron con una mujer de 80 que fue identificada como Micaela López y tildada por una persona en el lugar como la abuela que estaban buscando los policías. En su casa, y tal como había informado el cuñado, estaba también la nieta, Melani Ramos.
Cuando requisaron a la mujer de 80 años, los efectivos de la Policía Bonaerense encontraron entre su ropa 10 envoltorios de cocaína, que equivalían a 21,9 gramos de esa sustancia, y 10 bolsas pequeñas de marihuana, que sumaban un total de 62,5 gramos.
