Poema al personal de salud, de Emanuel Bibini
MIL GRACIAS POR SU ENTEREZA
Al personal de salud.
Va mi reconocimiento
al personal de salud
los que buscando quietud
a veces hallan lamentos.
Son más porfiados que el viento
y no hay mal que los detenga.
Así, al paciente que venga
ellos lo habrán de atender.
Cuando sea menester
harán lo que más convenga.
Solo ellos han de saber
lo que se vive de adentro
lo que es estar en el centro
del dolor, del padecer.
Del triste palidecer
de los enfermos que mueren.
De familiares que quieren
que los pacientes hallen calma
y con dolor en el alma
ellos les dicen que esperen.
No importa cómo esté el día
haya sol, o haya tormenta.
No se les cae la osamenta
y aunque, no con alegría
correrán cual tren en vía
para ayudar a un paciente.
Si acaso, hay un accidente
o si alguien los necesita
nada a ellos los debilita
correrán rápidamente.
Médicos, ambulancieros
enfermeros y enfermeras
sufriendo noches enteras
asistentes, camilleros.
También para los bomberos
siempre tendiendo una mano
terapistas, cirujanos
y gente siempre dispuesta
a salvar vidas, aunque cuesta
ya lo saben de antemano.
Por eso yo los saludo
con este humilde poema.
Salvar vidas es su lema
y por eso a ellos aludo.
Es poco, lo sé, y dudo
que haya algún verso que exprese
la gratitud que merecen
exacta y completamente.
les digo sinceramente
mil gracias por lo que ofrecen.
Si quizás no nombré a alguno
de ninguno me olvidé.
Mi corazón siempre de
gratitud a cada uno.
Por eso, pido, ninguno
sienta nada de tristeza.
Ustedes tienen grandeza
son guerreros y guerreras.
Por tanto, decir quisiera
MIL GRACIAS por su entereza.