Cortes de energía eléctrica: el gran bonete

 

En nuestra ciudad, nos quedamos sin energía eléctrica y la culpa la tiene… el gran bonete. Es decir, nadie, o todos. No alcanza con un comunicado que nos diga lo que ya sabemos. Un desperfecto, un vientito, un rayo, un alimentador, un cable, un poste, para el usuario es lo mismo y además, ya sabe que no tiene luz.

 

Existe un 0800 para reclamar o denunciar corte de energía pero… cuando se lo necesita, no atiende. Uno puede pasar horas llamando y esperando que alguien del otro lado lo atienda, pero no. No pasa nunca cuando se corta el servicio y si pasara del otro lado vamos a escuchar lo que ya sabemos. Disculpe, estamos trabajando para normalizar el servicio, no podemos decirle a qué hora estaría solucionado… Nada, tampoco nos sirve de nada, pero por alguna razón, siempre caemos en lo mismo sabiendo lo que van a decir del otro lado o con la esperanza de que si somos más los que nos quejamos, mas rapido se soluciona. Y no… no pasa nunca.

 

Como empresa de servicio público tiene el compromiso de operar el negocio en forma exitosa y responsablemente, creando excelencia en seguridad, desempeño y servicio a la comunidad. Eso mismo dice la página de la empresa. ¿Cuántos estamos de acuerdo en que cumplen con lo que dicen?

 

Una empresa de éstas características, es un negocio. Por lo general, en un «negocio» uno tiene la oportunidad de elegir si le gusta o no lo que compra, si lo atendieron bien, si la calidad del producto lo satisfizo o no y de esa forma elegir si vuelve a ese negocio o cambia y se va a otro.

Con este tipo de empresas, uno queda esclavizado. No tiene otra para elegir porque el servicio es pésimo y se la tiene que «bancar».

El tema es, y ¿donde está el control del estado, las multas si no cumplen y el rol de los gobernantes ante este tipo de situaciones donde los usuarios, rehenes, quedamos totalmente desprotegidos?

El estado debería controlar a través de los Entes Reguladores que son estructuras estatales creadas a lo largo de la década del 90 en el contexto del proceso de privatizaciones inaugurado a fines de los años 80 con la Ley de Reforma del Estado.  Ahora bien, uno tiene infinidad de teléfonos para realizar reclamos, a los entes reguladores, a defensa al consumidor, a la misma empresa también. Puede descargar su enojo en redes sociales, maldecir al «señor eden» y a quien se le antoja, pero la realidad indica, que la misma situación se repetirá calcada periódicamente. Volveremos a lo mismo una y otra vez.

 

Conocemos que las pobres cuadrillas de empleados, no tiene la culpa y que trabajan como pueden y con lo que tienen y es ahí cuando sabemos que nadie se hace responsable, no existen premios y catigos y que a nadie le importa lo que padecemos, por qué? Porque lo vamos naturalizando y es un gravísimo error. Cuando uno se acostumbra, deja de reclamar sus derechos, en este caso, derechos como usuarios.

 

Recibiríamos con agrado que las empresas sean multadas, como nos sucede a los usuarios si nos atrasamos en los pagos. Que sean controladas cuando no cumplen con el servicio, que sea controlada la inversión que deben hacer para brindar un servicio, como dicen, en forma exitosa y responsablemente, que si no cumplen por lo menos, que seamos gratificados con descuentos importantes en cada boleta y que sirva para que se vean obligados a invertir para que los usuarios no seamos los únicos perjudicados.

 

Porque así nos pasa a todos en distintos ámbitos. Si no trabajo bien, es probable que mi empleo peligre, si no dejo conforme a mis clientes, es probable que no vuelvan mas, si uno hace las cosas mal, es probable que pierda. Eso DEBERÍA pasar con cualquier empresa que debe brindar un servicio. Al corte de energía eléctrica muchas veces debemos sumarle el corte de agua corriente, doblemente GRAVE.

 

Tenemos derechos como usuarios y los gobernantes, la obligación de ponerse al frente de los reclamos. No queremos excusas, no queremos saber lo que ya sabemos, no queremos que nos digan que están trabajando, no queremos escuchar en cuanto tiempo se reconecta el servicio. Lo que queremos es lo que corresponde. No tener problemas, no quedarnos sin servicio ante el menor viento, no queremos un mal servicio que no cumple con lo que ustedes mismos dicen, no queremos problemas de tensión que quemen nuestras pertenencias, no queremos estar sin servicio cuando pagamos por el y queremos además que si no cumplen, los castiguen y que luego del castigo ejemplificador, hagan algo para que no se repita. Queremos que cumplan y que el estado este presente controlando, multando y trabajando para que lo normal no sea acostumbrarse a que el servicio falle, sino a que el servicio sea lo que dice ser.

 

Qué pasaría nos preguntamos, si nos ponemos de acuerdo todos los usuarios y no pagamos por incumplimiento de servicio? Nos cortarían el servicio a todos o pondrían el dinero en obras y elementos para que el servicio que deben brindar no tenga problemas?

Nosotros cumplimos con el pago del servicio, ustedes tienen OBLIGACIÓN de cumplir con brindar un servicio exitoso, responsable y eficiente. INVIERTAN!