Tiene arresto domiciliario, hizo fiestas, cobraba entrada y participaban menores de edad. Intervino Nocturnidad de la Municipalidad y Personal Policial.
A Miguel Ángel Godoy (55) le habían dado arresto domiciliario en una causa por drogas en su casa de Chivilcoy. Incluso, tenía puesta una tobillera electrónica. Pero nada de eso fue impedimento para él: armó junto a un amigo una fiesta clandestina en su propiedad, con más de 300 personas a las que, por cierto, también les vendió una entrada.
La insólita fiesta ocurrió el sábado en la casa donde Godoy estaba detenido, ubicada en Conesa y 508, en esa localidad bonaerense que queda a poco más de 160 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires.
Informe de la Secretaría de Seguridad de la Municipalidad de Chivilcoy
Es de destacar que se intervino en una fiesta clandestina con más de 300 personas, que se estaba desarrollando el día sábado por la madrugada en una finca ubicada en calle Conesa y 508 de este medio. Siendo las 01:04 horas, el personal policial, conjuntamente con personal de la Dirección de Nocturnidad, se constituyen en el domicilio ut-supra mencionado y constatan que se estaba desarrollando una fiesta clandestina, con música a todo volumen, y luminarias de tipo boliche bailable. En el lugar se constató que había varios menores de edad, y que para el ingreso a la misma se habían comercializado entradas, otorgando una pulsera habilitante para el ingreso a la misma. Se estableció que el propietario de dicho inmueble resulta ser el ciudadano *MIGUEL ANGEL GODOY*, de 55 años de edad, quien se domicilia en tal finca, reconocido en virtud a haberse realizado tiempo atrás un allanamiento dispuesto por la Ayudantía Especializada en Estupefacientes de Mercedes y que el mismo cumple en el lugar *arresto domiciliario* monitoreado por el Servicio Penitenciario de la Provincia de Buenos. Asimismo se identificó al organizador del mencionado evento, *PABLO EZEQUIEL JAIME*, de 36 años de edad. Por tal motivo, se labraron las actuaciones de rigor, dandosele intervencion a la Justicia competente en la materia. Asimismo, se informó de inmediato al Servicio Penitenciario Bonaerense.
Lo que menos imaginaron era que el dueño de casa estaba literalmente preso en ese lugar. Así, también denunciaron la violación de la domiciliaria de Godoy ante las autoridades que debían controlar su arresto domiciliario.
Lo curioso es que la causa por estupefacientes que investiga la Ayudantía Fiscal de Mercedes, y por la que tiene la prisión domiciliaria Godoy, se inició justamente en la propiedad donde el sábado el detenido llevó a cabo el evento.
Godoy y Pablo Ezequiel Jaime, de 36 años, fueron los organizadores de la fiesta en la casa del arresto.
En el lugar la música sonaba a alto volumen, había decoración lumínica y un clima de diversión entre los más de 300 invitados, muchos de ellos menores de edad, que para poder ingresar debían exhibir una pulsera que daba cuenta de que habían abonado la entrada.
