«Pido al municipio que me facilite un espacio para poder hacer una escuela de equinoterapia y actividades ecuestres»
Lorena Frisco es vecina de la localidad de Indacochea y presentó en LA GACETA DEL OESTE, un proyecto para realizar actividades ecuestres y equinoterapia.
«Este proyecto tiene más de un año. Me recibí en la Asociación Argentina de Actividades Ecuestres para Discapacitados, y quiero crear la primer escuela de actividades ecuestres en Indacochea. No solo tiene que ver con la equinoterapia, sino con todas las actividades que tengan que ver con el caballo. En febrero presenté un proyecto a la Municipalidad de Chivilcoy. Mi idea es que me permitan utilizar un pedacito del terreno del antiguo ferrocarril donde hace unos años atrás funcionaba un campo de doma».
Lorena entusiasmada, explica «Este espacio brinda a las personas, salir de lo cotidiano y conectarse con la naturaleza. Eso sería lo principal, el espacio físico y con un pedacito de ese terreno se podría trabajar perfectamente. Afortunadamente hay mucha gente entusiasmada en el proyecto y poniéndose a disposición para que se concrete. El lugar es ideal por la tranquilidad que garantiza estar más alejados de la ciudad».
Ampliando la información sobre la equinoterapia y las actividades ecuestres que quiere ofrecer, explicó «Lo que quiero logra es que no solo se participe de la equinoterapia que está diagramada de acuerdo a cada patología, que no sea nada mas el andar a caballo o galopar, sino que tengan la posibilidad de realizar otras actividades y lograr algo que es maravilloso que es la conexión con el animal, lograr el vinculo, que es lo más importante. La equinoterapia abarca todas las discapacidades, incluso que si bien no están regidos, son quienes sufren adicciones, depresión, etcétera en las que generar el vínculo es fundamental. Se incluye a todos y para cada patología hay ejercicios. Se basa en el vínculo con el animal. Es una actividad que nuclea personas capacitadas en discapacidad y personas con conocimientos en los comportamientos del caballo».
Consultada por los caballos elegidos para realizar ésta actividad, Lorena explica que deben ser caballos adultos mayores. «Hay que tener en cuenta que sean caballos dóciles preferentemente de muchos años, porque no puede reaccionar ante ningún golpe o ruido sino que siempre mantenga esa paciencia o suavidad en los movimientos. El caballo solo debe responder al mando del instructor. Una patada en la panza de un chico que demuestra emoción, el caballo no tiene que responder a eso, sino solamente a su instructor. Trabajo con un caballo que tiene 30 años que fue donado por un chico de Achupallas que es muy manso. Cuento con una petisa que se llama Rosenda, con la que practicamos doma racional de Martín Hardoy, que es la idea de poder hacer el vínculo con un animal tan chiquito. El tamaño es menos imponente y está bueno contar con eso porque te permite trabajar ante distintas situaciones».
Lorena Frisco, cuenta la importancia del vínculo y los beneficios de éstas prácticas «Siempre después de la monta se lo premia al caballo por el trabajo que se realiza. «El jinete es el que da el premio, generalmente es algo que no está acostumbrado a comer habitualmente. Para los chicos con parálisis cerebral por ejemplo se la da fardo de avena o algo rico porque el caballo mastica, no muerde y corta, y eso les provoca risa a los chicos. Está comprobado que se logran distintas reacciones de quienes participan de ésta actividad. Las personas no son solamente un diagnóstico y lo que permite es trabajar con las reacciones que se obtienen y enriquece el trabajo».
Lorena cuenta que se volcó a estudiar y trabajar de ésta forma cuando conoció a Franco que vive en Chacabuco «Cuando lo conocí hablaba muy poquito y un día me sorprendió diciendo Lore yo te quiero mucho y sentí que era mi misión y que tenía que dedicarme a esto. Franco de alguna forma me llevó a esto. Al año siguiente comencé a capacitarme y estudiar en el centro mas importante de la Argentina y lo recomiendo. Ésta actividad se puede hacer sin margen de edad. Cada paso del caballo es un impulso a los músculos, hay que pensar que cada paso del caballo brinda 109 impulsos por minuto, imaginate lo que hace un trote o un caballo en los músculos».
Lorena aclara que tal como las personas son diferentes, las reacciones son distintas. «Lo interesante es que se puede trabajar con todas las patologías con todas las personas. Me tocó trabajar con un hombre de 50 años que sufrió un ACV y que cuando llegó no podía si quiera montar su caballo y al poco tiempo el guiaba la terapia en el picadero. Es muy sanador y es muy importante establecer el vínculo».
Finalmente, Lorena hace el pedido a quien corresponda para que faciliten el espacio físico para poder realizar la actividad «La mayoría de las personas con discapacidad cuentan con una obra social, hace muy poco tiempo la equinoterapia se hizo ley en provincia de Buenos Aires, pero aún no todas lo cubren, por lo que pedimos al municipio de facilitar los medios para quienes lo necesiten cubrir el costo. Hay patologías que no se curan y esto trabaja en mejorarles la calidad de vida y que se convierta en una herramienta más».
MARAVILLOSO,OJALA LO CONSIGA !! *TRABAJAR* CON CABALLOS ES HERMOSO!!!!
Adelante!!!no te detengas!!!!el caballo es un fiel animal!!!te deseo lo mejor!!
No entiendo por qué tiene que garantizarle el municipio el trabajo a ella. Si soy ingeniero nuclear, voy a pedirle a la intendencia que me instalen un acelerador de plutonio.
Mujica…sencillo. por falta de recursos, por querer hacer las cosas bien, por juventud o por lo que sea.
Es triste volcar en un comentario la frustracion propia al verel trabajo ajeno.
Triste como profesional y mas triste aun como persona. Esa impresión me deja.
Exitos en lo que desea emprender Lorena. Todo llega si lo busca indistinta si es con o sin apoyo municipal.
¡Má qué «frustración propia»! ¿Si es una actividad tan solicitada por las obras sociales por qué tiene que hacerse cargo el erario público? Porque… gente sin recursos, que quiere hacer las cosas bien, jóvenes, por lo que sea, hay millones. Pero ¿qué tiene que ver el Estado con eso?